Neumáticos que giran con baja presión presentan síntomas fácilmente detectables. Las marcas circunferenciales en las paredes, el desgaste acentuado en los hombros, innerliner (capa interna) degradada y en forma de polvo, alteración de color, son señales que el neumático sobrecalentó debido a la baja presión o exceso de carga.
Los neumáticos que giran vacíos no pueden ser reparados y deben ser reemplazados inmediatamente, pues traen riesgos a la seguridad.
Figura 10: Apariencia de un neumático degradado por rodaje bajo bajas presiones.