A pesar de ser una herramienta importante para el consumidor, los resultados de treadwear se obtienen usando las condiciones de una prueba controlada. Las condiciones reales en que los neumáticos se utilizan casi siempre van a variar mucho de los usados en la prueba de UTQG (Uniform Tire Quality Grade).
Los factores como el tipo de carretera, la presión de inflación de los neumáticos, el alivio de las ruedas del vehículo, los hábitos de conducción, el par motor, el peso del vehículo, el tipo de transmisión, los niveles pluviométricos y las temperaturas de la superficie de carretera pueden afectar las tasas el desgaste de la banda en las condiciones de uso. Vale decir que el UTQG es una prueba ejecutada en el exterior con vehículos estadounidenses.
El problema con la clasificación UTQG de treadwear es que ésta está abierta a alguna interpretación por parte de los fabricantes de neumáticos, por qué es asignada después del neumático sólo haber experimentado un poco de desgaste, pues la prueba consiste en sólo 7.200 millas (11.520 km). Esto significa que los fabricantes de neumáticos necesitan extrapolar sus datos de desgaste para estimar la vida total.
Normalmente, comparar los valores de desgaste de banda entre modelos de neumáticos de una misma marca es un poco útil, pudiendo proporcionar algún indicativo o no. El intento de comparar las notas entre diferentes marcas de neumático no es tan útil.